o Eleazar López Contreras...
"El gobierno y el militarismo son instituciones aliadas. Al militarismo lo mismo le da que el que mande sea Rey, Emperador o Presidente. Su misión es sostener el poder..."
Por: Guillermo Sáez Álvarez
Después de 27 años de dictadura y a la muerte del Gral. Gómez, lo sucedió el Gral. Eleazar López Contreras, apodado "El ronquito".
Luego de sufrir durante tantos años semejante tiranía, cualquier gobierno era bueno, ya que peor, imposible.
López, a pesar de ser autoritario, no fue un dictador y durante su gobierno se hicieron mucha obras, unas de carácter social, otras de infraestructura y económicas, entre las cuales podría mencionar la primera Ley del Trabajo, El Banco Central de Venezuela, el Cuerpo de Bomberos, el Instituto Pedagógico, el Ministerio de Agricultura y Cría, los Museos de Bellas Artes y de Ciencias, la Sociedad Bolivariana. También tuvo que afrontar el primer paro petrolero y la huelga general de junio 1936, huelga ésta a consecuencia de la famosa "Ley Lara", de carácter represivo y poco difundida en los libros de historia, y motivo principal de este escrito.
Recordemos que hablamos de una época en la cual palabras como comunismo, anarquismo, nihilismo y terrorismo eran tabú, y aún siguen siéndolo para ciertas clases sociales y países capitalistas
Sin embargo, para la época ser comunista era algo así como "ser el diablo en persona" y mucha gente creía que comían niños y cualquier sospechoso de serlo, lo pagaba con cárcel o algo peor.
De allí, que para controlar la ley, el orden público, las huelgas y cualquier intento de manifestación pública, el gobierno de López Contreras creó la llamada "Ley Lara", llamada así en honor de Alejandro Núñez Lara, Ministro de Relaciones Interiores de entonces.
La ley especificaba que para efectuar cualquier reunión en espacios públicos, había que solicitar permiso con 24 horas de anticipación para ser estudiada y de ser considerada legal -léase no política- el gobierno daba su aprobación o no.
Para caso de manifestaciones no autorizadas, la Ley autorizaba en varios artículos, el uso de la fuerza pública (policía montada) para disolverla.
En primer término se avisaría a viva voz que en caso de no retirarse se darían 3 toques de corneta a saber:
- Cada 10 minutos se dará un toque de corneta que debía ser obedecido e irse retirando ordenadamente.
- Si al tercer toque la manifestación no se disolvía se haría uso de la fuerza.
- Esta disposición autorizaba a la policía montada a hacer disparos al aire en primer término.
- Los próximos disparos serían al "aire de los pulmones" (comillas mías)
Dicha Ley fue muy criticada por considerarse demasiado fuerte y fue la causante de la huelga general de 1936.
Hay una anécdota muy poco conocida sobre López Contreras, que no tiene nada que ver con la Ley Lara, decía que fue él quien trajo a Venezuela los "Fermentos Búlgaros" para la elaboración de yogurt, alimento éste que por prescripción médica tomaba regularmente por razones de salud.
López se exilió a Miami, después del golpe de estado a Isaias Medina Angarita, donde vivió hasta su regreso a Venezuela en 1948, muriendo a la edad de 88 años a pesar de que siempre se hablaba de su mal estado de salud.
Por: Guillermo Sáez Álvarez
08-09-2012.
JotaDobleVe Opina…
Eleazar López Contreras (Queniquea, 1883 - Caracas, 1973) es familia de mi abuela Ernestina Contreras Serrano (Vda. de Vegas) quien siempre se refirió a él como “el primo” o como “el flaco”… Y quiero agregar un dato curioso a este escrito… J. V. Gómez era un gocho sin los conocimientos de esos que llamamos “cultura general”, pero sí de una gran inteligencia natural y una zamarrearía digna de elogio.
J.V. Gómez pudo prever la llegada del modernismo, sobre todo después de la primera guerra mundial, y se cuidó de cambiar a Venezuela y en especial a las Fuerzas Armadas hasta el momento integrado por “hombres a caballo”, por unas más modernas y acordes a la época; Gómez convirtió al “flaco” López Contreras en su instrumento para lograr estas metas; siendo “el flaco” el primero en enviar jóvenes venezolanos a formarse en academias militares fuera de Venezuela (Chile entre otras) con lo que se logró el “corte prusiano” de las fuerzas armadas de la época. Entre los que fueron a estudiar fuera de la patria estaba el hermano menor de mi abuela Tte. Cnel. Carlos Contreras, quien muere prematuramente en Falcón. Al “Flaco” (o al “Ronquito”) le debe Venezuela la entrada al Siglo XX y al modernismo de la era industrial, lamentablemente, quienes lo sucedieron se encargaron de destruir ese intento…
Nos vemos en las teclas,
JotaDobleVe@GMail.Com
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