Tomado de: http://www.panodi.com/panodi/187280.html
“Las misiones dan calidad de vida a las comunidades”
“He visitado Barrio Adentro y misión Ribas y me he llevado la mejor impresión de esos programas, que constituyen un cambio fundamental en la calidad de vida de las comunidades beneficiadas”, dijo a este diario David Varela, presidente del Banco Mundial para Venezuela.
Calificó la relación de esa entidad con el país de inmejorable. “Es un encuentro entre la lucha contra la pobreza del Gobierno y la experiencia del Banco Mundial en esta materia”.
“Los indicadores económicos de Venezuela son muy positivos, creo que tendrán varios años de expansión”, señaló.
Texto: Juan Pablo Crespo
Las misiones dan calidad de vida a las comunidades calificó el presidente del Banco Mundial en Venezuela, David Varela, los programas sociales desarrollados en el país por el Gobierno nacional.
“He visitado Barrio adentro y la Misión Ribas me he llevado la mejor impresión de esos programas. Creo que están constituyendo un cambio fundamental en la calidad de vida de las comunidades beneficiarias”, dijo.
También aseguró que de mantenerse las tendencias económicas, el país mantendrá varios años de crecimiento y calificó como sano que Venezuela pueda fortalecer su base tributaria para ampliar el número de contribuyentes en lugar de aumentar la tarifa impositiva a un número pequeño de ciudadanos.
—¿Cuáles son las áreas de atención prioritarias del Banco Mundial en Venezuela?
—El Gobierno nacional nos ha señalado cuatro áreas prioritarias para la asistencia del banco. Debemos focalizar nuestro apoyo hacia el agua y saneamiento en zonas urbanas y rurales, hacia la gestión ambiental, el mejoramiento de barrios en ciudades diferentes a Caracas e infraestructura social para comunidades indígenas.
—¿Cómo evalúa la actual política del Gobierno nacional en la lucha contra la pobreza?
—Nosotros hemos examinado las políticas del Gobierno y creemos que están dando resultados. Hay programas sociales muy exitosos que han mostrado su impacto en la calidad de vida de las personas. Visité Barrio Adentro y la Misión Ribas, me he llevado la mejor impresión de esos programas y creo que están constituyendo un cambio fundamental en la calidad de vida de las comunidades beneficiarias. En conjunto con el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) trabajamos en el desarrollo de un sistema de evaluación del impacto de esos programas sociales. El sistema debe estar listo dentro de un año o año y medio. También junto con el INE estamos adelantando un estudio sobre la pobreza en Venezuela que debe terminar a mediados de este año. Una vez terminado el trabajo se lo entregaremos al Gobierno.
—Hay quienes señalan que los programas sociales del Gobierno están saturados por una gran carga populista. ¿Qué opina al respecto?
—No puedo emitir una opinión sobre ese punto. Sí puedo decir que lo que he visto de los programas es que son muy populares, que las comunidades están muy entusiasmadas. Creo que hay razones para que los programas sociales sean populares porque llenan un vacío en la producción de bienes o servicios para las comunidades marginadas. Cuando se llena un vacío, la comunidad experimenta una satisfacción en materia de un servicio de salud y educación que antes no tenía y ahora sí lo tiene.
—¿Qué opina usted de utilizar parte de las reservas internacionales para el pago de las deudas con los organismos multilaterales?
—Sobre este punto no tendría mucho que decir porque el señor ministro de Finanzas (Nelson Merentes) ha anunciado su juicio. El ministro subrayó que la decisión que se tome sobre este punto no afecta para nada la relación con los organismos multilaterales. Puedo asegurar que así es porque nos hemos reunido con el ministro, examinando, sobre todo, los futuros proyectos en Venezuela. La decisión afecta a proyectos antiguos, a proyectos muy viejos, incluso ya cerrados. Ahora vemos hacia el futuro qué nuevos proyectos financiaremos en Venezuela.
—¿Cómo puede entonces definir las relaciones entre en Banco Mundial y el Gobierno?
—Yo diría que es inmejorable. La hemos mantenido en un nivel de la mayor cordialidad durante los últimos tres años. En estos momentos hemos encontrado áreas de trabajo en conjunto, lo que nos anima a pensar que mejorarán más. Es un encuentro entre la lucha contra la pobreza del Gobierno nacional y la experiencia del Banco Mundial en esta materia.
—La economía venezolana tiene nueve trimestres creciendo de manera consecutiva. ¿Qué cree usted que sucederá con la economía nacional en los próximos dos o tres años?
—Hemos realizado un seguimiento de los indicadores económicos venezolanos durante los últimos años y son todos muy positivos. Si estas tendencias se confirman creo que se tendrán varios años de expansión constante de la economía nacional. Tenemos que observar los precios del petróleo porque una parte de ese crecimiento —no toda— está asociada a los precios del crudo. Es cuestión de continuar con el desempeño satisfactorio de la economía con las políticas económicas prudentes para mantener contenida la inflación y promover el empleo. Si todo continúa como esperamos, el desempeño del 2006 será muy positivo, más allá del 2006 es muy difícil especular, incluso para la economía mundial.
—¿Cómo evalúa usted la política de saneamiento fiscal en el país?
—Hay una dimensión muy importante de esa política fiscal del Gobierno que es la de la administración tributaria que universalmente es reconocida por los observadores, se han obtenido grandes ganancias en eficiencia y por consiguiente los ingresos fiscales del Gobierno han mejorado. Este es el resultado de la modernización del Seniat que ha acompañado el Banco Interamericano de Desarrollo. Es muy sano que Venezuela pueda fortalecer su base tributaria e incluir en esa base un número mayor de contribuyentes en lugar de tener que aumentar las tarifas de los impuestos a un número pequeño de contribuyentes.
—¿Es Venezuela un buen cliente para el Banco Mundial?
—Es excelente, porque Venezuela tiene una trayectoria impecable en el pago de la deuda pública externa, incluida la de los multilaterales. Es un accionista del Banco Mundial desde su fundación hace 60 años. Ha mantenido una relación permanente con el banco y en una época fue un país que no necesitaba de ningún préstamo de nuestra institución y más bien se emitieron bonos del Banco Mundial en bolívares para canalizar recursos hacia países más necesitados.
—¿Está bien encaminada la región en materia de integración?
—Creo que sí. Puedo asegurar que el Banco Mundial tiene todo el interés de apoyar esos procesos de integración. De hecho, acompañamos algunas propuestas de materia del gasducto. Siempre que los Gobiernos de la región nos solicitan apoyo en temas de integración, comercio e infraestructura estamos dispuestos a proporcionarlo.
—Venezuela quiere depender cada vez menos de los organismos multilaterales. ¿Puede esto sostenerse en el tiempo?
—No sólo Venezuela, sino otros países de la región están aprovechando la coyuntura económica actual que, en general, favorece a los exportadores de materias primas y productos básicos. Colombia y México han comenzado a pagar anticipadamente alguna deuda con organismos multilaterales. Se comprende que cuando existe una abundante liquidez uno de los destinos de esa liquidez es el pago de deuda antigua y la búsqueda de nuevas condiciones para deuda nueva o deuda futura.
PERFIL
David Varela tiene 44 años, nació en Colombia y desde hace tres años se encuentra trabajando en el país para el Banco Mundial (BM). “Me encanta todo de Venezuela, me siento como en mi propio país”.
Es abogado con una maestría en Canadá, donde laboró para una firma de abogados. Luego fue contratado por la firma internacional Andersen Consoulting.
Desde hace 14 años está ligado al BM. Ha trabajado en el Caribe, Centroamérica y los países tanto andinos como del sur.
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