LA CONSPIRACIÓN MEDIÁTICA

o desprecio al pueblo por la oligarquía...

(...) Hablan de libertad de prensa. No hablen de libertad de prensa. La verdadera libertad de prensa haría que aquí se preocuparan por enseñar a los hombres a escribir, a pensar, para que puedan tener la libertad de expresar sus pensamientos y tengan la libertad de defender sus derechos; llaman libertad de prensa al derecho de venderse al mejor postor, al derecho de venderse a la peor causa. Y siempre están hablando, empleando términos falsos, como si no supiera todo el mundo que gobiernan, por lo general, las oligarquías; gobiernan las castas, gobiernan los poderosos poseedores de las riquezas y de los recursos de las naciones (...)

Fidel Castro

Por: Dr. Cornelio Vegas.

La oligarquía codiciosa criolla, la más corrompida del continente americano, ha utilizado a los grandes medios de comunicación, prensa y televisión, que están en manos de cuatro familias, algunas de ellas de origen no-venezolano, inspirándose en las prácticas constantes de repetir mil veces una mentira, para que ésta termine supuestamente convirtiéndose en una verdad. El objetivo mediático conspirativo es claro: crear desconcierto y desinformación, ablandar el sentimiento patriótico de los venezolanos. Desde mucho antes de asumir la presidencia Hugo Chávez, el terror mediático se desencadenó con abierta impunidad en defensa de la ultraderecha, el imperialismo y el sector escuálido de la política, no olvidemos como la población salió al frente de la andanada de calumnias y sofismos alertando sobre “plomovisión” y “venenovisión”, que sobresalían con saña en eso de manipular con perfidia las informaciones. Recordamos como la prensa al servicio de los poderosos del gran capital, calificaban al pueblo humilde de “lumpen” que debería ser eliminado por la jauría reaccionaria. Es así, que con simulaciones, subterfugios, procedimientos insidiosos dirigidos a engañar a la población, la fanfarria mediática antinacional, concluyó el golpe fedecamarero del 11 de abril del 2002, porque fuera de toda duda razonable, ese golpe de Estado fue producto del cañoneo antinacional dueño de esos medios de la derecha, para despojar al pueblo venezolano de sus derechos. La ciudadanía tiene que estar alerta ante la nueva arremetida de la canalla mediática que esta figurando una nueva asonada golpista en alianza con lo más podrido de los políticos de la fenecida Cuarta República Adecopeyana, y para ello cuentan con millones de dólares que les remite la gusanera yanqui.

Lamentablemente la Ley Sobre la Responsabilidad en Radio y Televisión, está vigente pero no se ha aplicado, y esta impunidad envalentona a los conjurados a proseguir con el aniquilamiento de las instituciones revolucionarias y bolivarianas y muy especialmente se ensañan contra la Constitución Bolivariana. Detener la conjura mediática y ajustarle cuentas, es hacer patria.

Por: Dr. Cornelio Vegas.