Lo que hicieron hoy a nivel de el teleférico, en la Cota Mil, en horas de mediodía la palabra libertad fue escrita con los cuerpos de jóvenes universitarios...
¡¡QUE BELLEZA!!
Tienen mucha iniciativa e ilusión...
Pero, La próxima ves pueden escribir "Freedom" y así Bush les manda mas dinerito. O pueden escribir "Levy`s"…
Tan lindos, haciendo uso de su sifrina libertad para protestar por la libertad.
Estos sifrinos de todas las edades y sexos, salen a protestar por la LIBERTAD y luego se van a bañar con agua caliente, a dormir en sus cómodas habitaciones, a ver cable, chatear con Wi-fi, juegan con el Golden Retriver, y luego van a beber a Las Mercedes o a comer pizza a El Hatillo.
Es una vida cómoda donde la única excusa de protesta es intangible, no tienen nada material por lo que luchar, solo una motivación estomacal, visceral, por haber visto a las "actrices" llorando y rezado; o por el odio que les han metido sus Padres en la cabeza dentro de sus propias casas.
En el fondo lo que hay es una defensa de privilegios económicos, mas nada.
Es bien triste para la oposición que a la final el recurso que les quedo es la manipulación sentimental a unos adolescentes.
Llegado a mi buzón de Red de Inf. Simón Bolívar
Nótese que el video de Globovisión NO dice haber sido grabado por un videoaficionado, por lo que podemos asumir que fue grabado por un camarógrafo de Globovisión.
ResponderBorrarDebió haber una sincronización muy buena entre el camarógrafo de Globovisión y los jóvenes manifestantes:
Para bajar desde el Hotel Humboldt a Caracas, el teleférico tarda unos 15 minutos, más o menos, sin incluir el tiempo de subida. El camarógrafo tuvo que subir al Humboldt y entonces volver a bajar (nótese que el video fue grabado en bajada), enviando una señal vía celular a los estudiantes de que ya aproximándose a la cota mil, de forma tal que los estudiantes formaran la palabra Libertad en el momento apropiado.
Evidentemente contaron con la total colaboración del personal de Ávila Mágica para realizar la grabación, dado que Avila Mágica y Globovisión comparten el mismo dueño: Nelson Merezhane.
Entonces ya no estamos hablando de una protesta de estudiantes reseñada por la prensa, sino de una protesta de estudiantes colaboración, ayuda y coordinación de dos empresas privadas: una que administra el teleférico, y otra que finge ser canal de noticias pero en realidad actúa como agencia de mercadeo y promoción.